“Una
persona puede ser muy divertida socialmente pero por dentro puede sentirse vacía
y sola…”
Recientemente
un actor muy reconocido, Robin Williams, partió de este mundo, no de una forma
que alguien hubiese pensado, menos de él. Un hombre el cual llenó de felicidad,
risas y alegría los corazones de muchas personas, alguien quien tuvo una
familia hermosa, se adentró en el mundo de los videojuegos y de las
entretenciones de este mundo, opto por terminar su vida con el suicidio.
Muchos están desconcertados, muchos están tratando
de indagar un ¿por qué?
Francamente
nunca me había afectado la partida de alguien a quien no conociera, como un
artista de Hollywood en este caso, pero con este personaje fue distinto, me dolió
y la verdad trajo a mi mente muchos pensamientos, recordé varias de sus películas,
las muchas veces que me reí o llore con alguna actuación que tuviese, y eso
trajo a mi memoria una de mis películas favoritas, “La Sociedad de los Poetas
Muertos”.
Esta película
es de mis favoritas no solo por el hecho de que es muy buena sino por el
momento de mi vida en que la vi, en esos momentos no sabía qué hacer con mi
vida, todo era un desorden, y si algo pude sacar de esa película fue esto:
“¿Sabría
alguien decirme que somos?... somos
comida de Gusanos. Todos vamos a morir un día, y solo viviremos un limitado número
de años. Está en nuestras manos hacer algo con nuestras vidas. Algo
Extraordinario. “
Mucho después
Leí el libro y de igual manera me encanto, y fue porque imaginaba cada palabra
de el Prof. John Keating actuada por el señor Williams.
Yo no busco un porqué de su muerte, yo lo recuerdo por lo extraordinario
que hizo en su vida; el logro hacer una marca en millones personas, tanto que
el mundo entero lloro su perdida, pero también espero que lo recuerden por su
inigualable talento para hacer sentir bien a las personas.
Este post es dedicado a este señor porque se lo merece. Si no han visto
o leído la película/libro que acá describo, se las recomiendo.
Últimamente he estado en un vaivén de emociones, he tenido pérdidas
emocionales, me he sentido solo, me he sentido que cada decisión que tomo no me
acerca ni me aleja de nada. Quiero retomar el rumbo, seguir con lo que me
gusta, cumplir mis metas, hacer ALGO EXTRAORDINARIO con mi vida.
Para muchos de mis amigos soy el capi, el que los organiza, el que hace
el llamado, el que logra juntarlos a
todos cuando estamos más lejos. Pero qué pasa cuando el capitán necesita que lo
ayuden, que se junten con él, que se acerquen los que están lejos. Solo tengo
claro una cosa, aunque este sintiéndome como lo hago ahora, sé que hay cosas
para mí aun en este mundo, cosas que son mías y que tengo que llegar a ellas.
Las personas siempre quieren llegar a ser felices, lo serías si
entendieran que la felicidad es un camino, no un destino.